10 árboles venenosos
¿Que es un árbol venenoso?
1. Tejo (Taxus baccata)
2. Cica (Cycas revoluta)
3. Bonetero (Euonymus europaeus)
4. Boj (Buxus sempervirens)
5. Manzano (Malus domestica)
6. Cinamomo (Melia azedarach)
7. Ricino (Ricinus communis)
El ricino es un arbusto, a veces en forma arbórea, de tallo grande y leñoso, hueco, que, al igual que los peciolos, nervios e incluso las propias hojas en algunas variedades, puede tomar un color púrpura oscuro y suele estar cubierto de un polvillo blanco, semejante a la cera. Las hojas son muy grandes, de nerviación palmeada y hendidas de 5 a 9 lóbulos, de bordes irregularmente dentados; las hojas son alternas, con peciolo muy largo, unido por su parte inferior. Es una planta muy ornamental, que podemos encontrar en jardines, así como en terrenos degradados, pues se adapta a condiciones ambientales extremas.
Las semillas son muy tóxicas, por la presencia de una albúmina llamada ricina, ya que basta la ingestión de unas pocas, masticadas o tragadas, para que se produzca un cuadro de intensa gastroenteritis con deshidratación; puede dañar gravemente el hígado y el riñón e incluso producir la muerte. Es una de las toxinas biológicas más potentes que se conocen. El aceite de ricino, obtenido por prensado de las semillas y calentado para destruir la ricina, es uno de los purgantes más reputados, debiéndose su acción al ácido ricinoleico; aunque tiene el inconveniente de su desagradable sabor. En la actualidad encuentra aplicaciones en la industria de pinturas y barnices, así como para la fabricación de lubricantes y líquidos para frenos.
8. Gandul, tabaco moruno (Nicotiana glauca)
El gandul es un arbusto, a veces llega a ser un verdadero árbol, que frecuentemente vive como naturalizado en zonas degradadas, en márgenes de caminos y de carreteras y en los taludes de las zonas mediterráneas litorales. Debido a su potencial colonizador y constituir una amenaza grave para las especies autóctonas, los hábitats o los ecosistemas, esta especie ha sido incluida en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras. Las hojas de esta especie son usadas para la fabricación de cigarrillos de baja calidad, esto se debe a que el efecto de la nicotina no es tan potente como sucede con la de la planta del tabaco (Nicotiana tabacum).
Su toxicidad es debida a la presencia de un metobolito activo de vitamina D3 y del alcaloide anabasina, considerado extremadamente tóxico y letal en animales. La razón principal del cultivo de este ejemplar radica en sus usos medicinales y rituales, mediante el cual se usan sus hojas de forma externa para aliviar diversos males como: dolores de cabeza, hemorroides, heridas, entre otros.
9. Adelfa (Nerium oleander)
La adelfa es un arbusto o pequeño árbol de hojas persistentes de hasta 4 m de altura, que originariamente se encontraba como planta nativa en una amplia zona que cubría las riberas de la cuenca del mar Mediterráneo, incluido el Sahara, hasta el sudeste asiático. Se ha difundido ampliamente por todas las zonas con clima propicio como planta ornamental. Muchas de las medianas de autopistas están ocupadas por esta esplendorosa planta, de la cual destacan sus flores. De su gran resistencia, se tienen testimonios sorprendentes, como por ejemplo que fue la primera planta en florecer después de la explosión de la 1.ª bomba atómica sobre Hiroshima el 6 de agosto de 1945.
La adelfa es una planta muy venenosa. Las raíces y las hojas son ricas en sustancias digitálicas de mayor actividad que en la «dedalera» (Digitalis purpurea), tal el caso de como la oleandrina, un glicósido cardíaco tóxico muy activo. La concentración de oleandrina es mayor en las raíces, seguida por la concentración en las hojas y en los tallos. La concentración de oleandrina en flores es significativamente menor. Las flores requieren la visita de insectos para producir semillas; la polinización se produce por medio de un mecanismo de engaño. La llamativa corola ejerce una fuerte atracción en los polinizadores desde cierta distancia, pero las flores no secretan néctar y no ofrecen recompensa a sus visitantes. Por ello, reciben muy pocas visitas, como suele suceder con las especies cuyas flores no secretan néctar. Los miedos hacia mieles contaminadas con néctar tóxico de adelfa son por tanto infundados.
10. Falsa acacia (Robinia pseudoacacia)
Las abejas producen con las flores de robinia una miel conocida popularmente como «miel de acacia». Además, las flores pueden se comidas, y es frecuente el uso en diversas recetas culinarias.
No obstante, la corteza, hojas y semillas son tóxicas. La robinia posee una lectina en sus semillas, que las hace tóxicas: los caballos que consumen la planta desarrollan síntomas de anorexia, depresión, diarrea, cólicos, debilidad, y arritmia cardíaca. Los síntomas aparecen generalmente alrededor de 1 hora de haber ingerido y se requiere de la atención veterinaria inmediata. Sólo las flores se pueden comer.